José Luis Gonzalo Marrodán, psicólogo especialista en psicología clínica del panorama nacional, nos ofrece su opinión profesional sobre los aspectos psicológicos del caso de “La Manada” y habla sobre el manifiesto emitido al Tribunal de Justicia.
El pasado mes de mayo del 2018 se emitió un comunicado por parte un colectivo de 2.000 psicólogos y psiquiatras donde exponían una visión científica sobre los aspectos psicológicos de la víctima del delito sexual de “la Manada”. En tan solo 48 horas, el documento se difundió masivamente a través de las redes sociales y medios de comunicación alcanzando un fuerte impacto social.
José Luis Gonzalo, psicólogo especialista en psicología clínica, nos ofrece como profesional del medio, su visión acerca del manifiesto y subraya la necesidad urgente de la prevención, incluyendo desde la infancia una educación sexual con perspectiva de género, transversal y estructural, que favorezca el cumplimiento de los derechos de las mujeres; reforzando de esta manera la importancia de la toma de conciencia por parte de la sociedad.
Destaca la importancia del documento en sí, puesto que en él se reflejan los dos ejes fundamentales que querían que ahondaran en la sociedad:
En primer lugar, los conocimientos científicos en torno a la psicología del trauma. Como bien explica Jose Luis, existe un sistema defensivo que no solo es luchar o huir, sino que el sistema defensivo incluye la respuesta de inmovilización por parte de la víctima cuando no es posible luchar o huir. “Es muy gratificante que cualquier ciudadano te hable de la Teoría Polivagal de Porges, eso quiere decir que el objetivo está cumplido” señala.
Gracias a este manifiesto y la difusión masiva por parte de los medios de comunicación, hoy en día es mucho más conocido y de alguna manera se ha podido hacer llegar una perspectiva diferente al sistema de justicia que desconocían hasta el momento.
Ahora esperan que este conocimiento científico de expertos en trauma, que son los que realmente están en contacto con las víctimas y saben como reaccionan ante las agresiones sexuales, lleguen al ámbito judicial. Que traumas peritos puedan recoger la teoría del trauma para elaborar informes periciales teniendo en cuenta que el 70% de las víctimas puede reaccionar con una respuesta de inmovilización.
En este sentido, los psicólogos y psiquiatras entienden que lo que hay que hacer es apoyar la superación de la víctima “en lugar de criticarla o someterla a vigilancia”. Como indican en el fragmento, este hecho “solo sirve para seguir agrediéndola e incluso contribuir a su retraumatización”
El segundo aspecto que quiere destacar José Luis, tiene que ver con un objetivo transformacional, tarea de todos, en el que hay que seguir trabajando continuamente, y es la necesidad de educar en valores desde la familia, la escuela y cualquier ámbito social para que los derechos de las mujeres y los niños sean respetados. Que se incluya una perspectiva de género en la educación y también en el ámbito judicial. “Es crucial si queremos que nuestros niños, hombres y mujeres, tengamos una sociedad en la que se promueva el buen trato fomentando un mundo más justo y más humano”
“Dar las gracias a los compañeros y compañeras que han participado en esta iniciativa, a todos aquellos que firmaron desinteresadamente, a los que se han adherido posteriormente, a todos los medios de comu-
nicación que han participado divulgándolo y a todas esas personas que de alguna manera ha aportado su grano de arena para que esto sea posible” finalizaba José Luis.
Con todo ello se quiere conseguir que surjan nuevas iniciativas y que poco a poco se vaya haciendo realidad una sociedad más justa y más humana.
A continuación, ofrecemos un fragmento de la Carta abierta de los/as profesionales de la psicología y la psiquiatría al Ministerio de Justicia y a la ciudadanía:
“A propósito de la sentencia emitida sobre los cincos jóvenes sevillanos condenados por un delito de abuso sexual y del debate que se está produciendo estos días, desde nuestro profundo y enérgico rechazo a la misma, las personas abajo firmantes emitimos un comunicado elaborado por profesionales de la psicología y psiquiatría,[…]. Con este comunicado, […] queremos lograr un doble propósito. Por un lado, aportar información científica que pueda contribuir a esclarecer algunos aspectos problemáticos […]. Por otro lado, realizar una reflexión pública acerca de la necesidad de cambiar el foco de análisis a la hora de aportar soluciones para un problema que nos interpela como sociedad […]. Nos mueve, además, un deseo de colaborar con la Justicia como parte de una ciudadanía responsable y como profesionales especializados en esta área de conocimiento.
Queremos ofrecer desde aquí nuestro conocimiento sobre el impacto traumático que diversos sucesos y acontecimientos causan en las personas y en cómo éstos determinan sus reacciones. En este sentido, creemos que nuestra aportación puede arrojar luz a una labor tan sumamente compleja y delicada como es la determinación o no, en este caso, del consentimiento de la víctima y de sus posibles reacciones ante una situación como la que describen los hechos probados.
De acuerdo a la Teoría Polivagal de Porges, ante una situación de muerte, lesión grave o violencia sexual, o la amenaza de las mismas, es común una respuesta de inmovilización cuando no es posible huir ni escapar. […] Esta es una forma rápida de reacción de nuestro
sistema nervioso para tratar de sobrevivir y minimizar el impacto del suceso amenazante cuando, como hemos dicho, no es posible huir ni escapar. Por tanto, en una situación así, quizá no sea lo más conveniente insistir en la cuestión de un consentimiento o de una resistencia, ya que esta capacidad estará anulada y es una agresión en sí. […].
Tampoco hay lugar para preguntarle a la víctima, ni es determinante el hecho de que tuviera respuesta sexual, pues en este momento el organismo genera sustancias para producir una analgesia frente al dolor[…]
Por último, en cuanto a la capacidad de resistir y recuperarse de la crisis de adversidad, […] habría que apoyar la superación que se ha podido llevar a cabo tras la experiencia traumática, en lugar de criticarla o someterla a vigilancia. Lo contrario, es un comportamiento realizado desde la ignorancia, pues solo sirve para seguir agrediendo a la víctima e incluso contribuir a la retraumatización.
[…] Como profesionales de la psicología y la psiquiatría consideramos por tanto esencial que los informes periciales que se emitan en procesos como éste cuenten con el asesoramiento técnico de personas expertas en trauma.Precisamente para superar estas situaciones, los y las profesionales de la psicología y la psiquiatría consideramos que es necesaria la formación obligatoria en perspectiva de género en todos los organismos oficiales y ámbitos profesionales, juntamente con la educación emocional. […] Para ello, debemos ofrecer espacios educativos y psicoterapéuticos donde los hombres y la sociedad en general puedan repensar las masculinidades, reconstruyendo la mirada hacia la mujer y el espacio sexual.”
*Para poder leer el manifiesto íntegro: https://psicologospozuelo.es/mercedes-bermejo-con-nieves-herrero-en-onda-madrid/