¿Para qué sirve?

Nuestra manera de trabajar, la psicoterapia emocional sistémica, nos ha demostrado bajo la propia experiencia en estos años de trabajo que cuando el paciente vive su experiencia emocional personal en un encuentro relacional, ello cobra un potencial mayor que moviliza su interior y el entorno en el que se encuentra. Siendo así, el desarrollo humano se da en el encuentro y la relación intima.

Es por ello por lo que desde hace años abrimos los grupos de terapia con la finalidad de dar un espacio entre iguales, por ser el espacio relacional más cotidiano: el grupo de amigos, los vecinos, los compañeros de trabajo, las relaciones de pareja, etc.

Siendo un entorno terapéutico, el grupo que aquí se forma ya tiene unos limites concretos que lo definen. No obstante, para que algo resulte terapéutico es imprescindible mantener una mirada de respeto hacia los demás y hacia uno mismo, una mirada de aceptación. Es aquí donde el individuo entra a formar parte a un entorno diferente donde poder experimentar que es algo más de lo que creía ser en la cotidianidad de su día a día.

En este espacio, la persona puede llegar a descubrirse en la mirada del otro sin temor a las consecuencias. De esta manera, puede dejar salir su cara más rabiosa, desordenada y seguir siendo alguien para el grupo. Compañeros y terapeuta. 

¿Cómo?

Cuando el marco terapéutico incluye la necesidad de trabajar las relaciones con iguales, el centro tiene disponible varios espacios grupales divididos por edades. Los grupos se crean tras una primera sesión informativa bajo un criterio heterogéneo en cuanto a personalidad y problemática, buscando un espacio lo más real a la vida fuera del grupo.

Los espacios grupales son ocho. Siete de ellos divididos por edades con una finalidad relacional y emocional bajo los principios de la “psicoterapia emocional sistémica” que nos caracteriza en Psicólogos Pozuelo.

Se añade a estos, un último grupo que busca fomentar las capacidades cognitivas necesarias para el trabajo académico. Un grupo de técnicas de estudio que se configura sin olvidar la importancia de lo relacional y emocional, pues es en lo relacional y, bajo la energía de las emociones que surgen, donde el cambio es significativo. En este punto, lo cognitivo no va a ser menos, ya que, gracias a la actitud de respeto y cooperación, la persona despliega nuevos recursos cognitivos en compañía de otro, el cual también va desarrollándose.

Así pues, dentro de la intervención, generar interacción asertiva es el principal objetivo, ya que con ello se puede ver el lugar que ocupa cada uno en el grupo, las dificultades y bloqueos que cada uno presenta, la manera del grupo de resolver conflictos, las necesidades que surgen y su posible resolución, la naturaleza del grupo que se crea entre ellos, etc.

Para todo ello, la comunicación es importante, aunque no siempre podrá ser una comunicación verbal, sobre todo cuando se trata de los más pequeños. Por ello tenemos que adaptarnos al momento evolutivo del grupo y al grupo singular que surge de esa interacción, para encontrar el lenguaje más apropiado. El juego, la pintura, el movimiento, las interpretaciones… todo ello son vehículos con los que también se comunica y se obtiene material de trabajo.

Cabe decir que, para los menores de edad, se incluye a la familia proporcionando un informe trimestral que rinde cuenta de lo que se está haciendo en el grupo y cómo está su hijo o hija dentro de él.

¿Cuándo?

Dos sesiones mensuales repartidas en el calendario.

Es un grupo abierto, por lo que se puede entrar a formar parte del grupo a lo largo de todo el curso, con una previa sesión de derivación o informativa. Es importante para nosotros que nos conozcan antes de comenzar en el grupo, del mismo modo que vemos necesario conocer nosotros a quien entrará a formar parte de él.

En esa primera sesión en la que nos conocemos, se entrega el calendario con las fechas fijas del grupo que le corresponda.

¿Dónde?

El grupo se lleva a cabo en nuestro centro de Psicólogos Pozuelo, buscando el espacio más cómodo para cada grupo. Es importante para nosotros ver cómo necesita el grupo ocupar el espacio de la sala. Para los más pequeños muchas veces el mejor lugar es la alfombra. Y con otros grupos las sillas. Pero sea donde sea, se busca esa comodidad para expresar y comunicar sintiéndonos parte del grupo.